LA AUTOESTIMA:
La autoestima es definida por la Real
Academia Española como la valoración generalmente positiva de uno mismo. Otras
definiciones que podemos encontrar son, por ejemplo, en el diccionario de
Google, expresada como la consideración o el aprecio que uno tiene de sí mismo.
Para ponernos en situación, el otro día
encontré un artículo en Internet de la página web Psicología y mente, en la que
te explicaban 10 claves para aumentar tu autoestima.
Desde mi punto de vista, me
resulta muy inquietante que se trate este tema considerado generalizando que
todas las personas con baja autoestima deben de seguir estos pasos. Es cierto,
que obviamente, no se van a escribir más de un millón de artículos dedicados a
cada caso concreto, pero también es cierto que muchas personas no pueden seguir
estos 10 pasos. Uno de ellos, por ejemplo, es que pienses más en positivo, pero
no te da explicación alguna de cómo hacerlo, simplemente te dice que tu
filosofía de vida debe estar basada en el yo puedo. Una persona que realmente
tiene un problema tan grave como la baja autoestima nunca va a poder pensar en
positivo ya que su mente se lo impide.
En algunos casos, las personas piensan
incluso en suicidarse y si les dices que simplemente piensen en positivo no vas
a conseguir nada. Por otro lado, otros de los pasos a seguir es el respeto
hacia ti mismo. En este caso, ocurre lo mismo que en el anterior, la mente
impide totalmente este pensamiento ya que, si tienes una falta de autoestima,
tienes una falta de cariño hacia ti mismo, y por tanto de respeto. Es muy
complicado que las personas con este problema cambien diciéndoles solo eso.
Aún así, como he dicho anteriormente, se
trata de consejos muy generalizados debido a que cada persona es un mundo
completamente diferente. Existirán personas que con frases motivadoras puedan
quererse a sí mismas y habrá personas que lo que necesiten sea ir a terapia.
Relacionado con este último punto, un
tabú que tenemos hoy en día en la sociedad, aunque poco a poco se va
eliminando, es el que acudir a un psicólogo o a un psiquiatra. No estás loco o
loca si acudes a este tipo de especialistas y si alguien te dice lo contrario,
plantéale el hecho de que, si necesitas algún tipo de ayuda en cualquier
ámbito, la pides. No ocultes tus problemas nunca porque eso va a ir creando una
bola cada vez más grande hasta que un día explote y no haya vuelta atrás.
Recuerda que no estás solo/a.
-Entrada realizada por Andrea Carbajo Carrasco-
-Entrada realizada por Andrea Carbajo Carrasco-
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